La vida es un fragmento de tiempo, un
bonito recuerdo que forjamos día a día.
Si quieres prosperidad, siembra
trabajo.
Cerremos los ojos y pensemos en todo lo que nos hizo sonreír y ser
felices en este año que dejamos.
Que en el 2019 se cumplan todos los deseos
y que estén presentes todo el año el amor y la armonía.
La humildad, el sacrificio, el valor y la
dedicación, son virtudes necesarias en la vida, pero la mayor virtud y la más
valorada es el amor que brindas y recibes.
En esta Navidad anhelamos que no paremos de soñar,
no dejemos de creer y no nos olvidemos de disfrutar.